Elaborado con un 100% de malta de cebada cultivada en el noreste de Francia. Ha sido doblemente destilado en alambiques Charentais y añejado en tres tipos de barriles de segunda vida (Sauternes, Borgoña y Jerez) para garantizar el mejor envejecimiento. Los barriles se han ensamblado cuidadosamente para crear un whisky delicado, sabroso y único.

Cata

De color ambarino, este whisky resulta dulce y complejo. La nariz se caracteriza por notas sutiles entre frutas, especias y un ligero toque de cuero. En la boca, la entrada es fina, apareciendo notas de especias dulces asociadas con notas más afrutadas y toques de turba.