Este whisky se compone de 50% de cebada malteada y 50% de grano crudo. Goza de una doble destilación en alambique charentais, envejecido en pequeños lotes en barricas de coñac y Sauternes, que lo dotan de un carácter único y complejo.

Cata

Claro y brillante con un hermoso color ámbar. En la nariz se caracteriza por aromas de mermelada de naranja, albaricoques secos y jengibre, que le dan delicadeza y redondez. En el paladar es seco y ligeramente afrutado, donde encontramos de nuevo notas de cáscaras de naranja y frutos secos. El final es intenso, mineral con ligeras notas de especias.